Como resultado de la poca capacidad de diálogo y escucha, las confrontaciones del ejecutivo regional y el Consejo han sido frecuentes. El último hecho que trascendió ocurrió entre el lunes 14 de setiembre y ayer, que terminó con la intervención de policías que tuvieron que desalojar a nueve consejeros que exigían diálogo al gobernador, pero este viajó a Lima dejando su responsabilidad por tres días al gerente general Manuel Octavio Quispe.
Como se recuerda, último lunes
más de ocho consejeros regionales mantenían una medida de protesta en la puerta
del Gobierno Regional de Puno. Exigían al gobernador Agustín Luque
explicaciones sobre la intención de compra de plantas de oxígeno para Puno.
Inclusive pernoctaron en una carpa.
La protesta continuó hasta hoy, a las 4:00 pm. Cuando se negociaba la mesa de conversación entre el gerente general y nueve consejeros, vino la policía y desalojó a la multitud. Según el consejero Jorge Zuñiga el presidente del Consejo Regional, Walter Mamani Quispe, fue detenido y conducido a la comisaría, mientras que la consejera por la provincia de El Collao, Nury Mamani Machaca, terminó en el piso por empujones de un efectivo de la policía.
En medio de este panorama, el
gobierno regional emitió un comunicado donde informa que el gerente general es
el encargado de la administración del despacho del gobernador. Incluso
justifican que el ejecutivo regional promueve la democracia.
También se conoce que el
gobernador Agustín Luque, dejó la encargatura de la gobernación al gerente
general Manuel Octavio Quispe Ramos, mediante memorándum 211-2020-GR-PUNO/GR,
para asistir entre los días 15, 16 y 17 de setiembre a una reunión con el
presidente de la República en la Asamblea Regional de Gobiernos Regionales
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